… creo que era con faldas y a loco; en cualquier caso, con faldas… pues se trata de una falda y una blusa.

Os cuento rápidamente, la falda la compré el año pasado para la preboda de mi hermano, es de Fraile Oficial, la vi en su Instagram, y me gustó tanto que fui a su atelier en Madrid a que me hicieran una, tu eliges las capas de flecos que quieres, la largura y el color… os dejo en enlace de su web, donde tienen un acceso directo a la falda ?

La estrené para el evento, pero la llevé con unas sandalias y una camiseta blanca de algodón, creando así un look un poco más casual.

Este año se casaba mi amiga Elena, y pensé que era la falda perfecta, eso sí, necesitaba una parte de arriba, así que en vista de que encontrar una camisa del mismo color exactamente podía ser complicado, y ando un poco justa de tiempo, decidí buscar una tela para hacerla yo misma, y una vez más, en Julián López encontré rápidamente el tejido perfecto.

Algo sencillo y rápido de hacer, como he dicho el tiempo no me sobraba, de un viaje a otro y con apenas una semana, conseguí encontrar ratitos para montarla. Era más efectivo invertirlo en hacer la blusa, que el resultado sería seguro, que ponerme a buscar sin saber si iba a encontrar lo que yo había imaginado en mi cabeza.

Con lo que, que sirva este artículo una vez más, a empujaros a que os lancéis a hacer lo que os gusta, en este caso hablamos de costura, pero es aplicable a cualquier otra cosa que os ronde la cabeza y no os atreváis a hacer.

En mi caso concreto, atreverme a hacer cosas como esta, además de divertirme, me soluciona situaciones como esta por ejemplo,  me permite hacer realidad las prendas que me imagino, y sobre todo es como una especie de terapia que me hace estar en el momento presente, y que me da la posibilidad de materializar las ideas que me sugiere mi imaginación.